Texto: Carlos Noro |
Fotos: Santiago Diaz Valdez (Santi Sombra)
Decir que el rock pesado tiene una impronta sudamericana de fuerte base argentina es casi una obviedad. Pappo´s Blues, Manal, Pescado Rabioso, El reloj, Color Humano y Aeroblus entre otros fueron son la escuela en donde el riff, el blues y eso que muchos llaman feeling confluyó para hacer vibrar, imaginar y soñar a varias generaciones que siguen religiosamente la misma senda. Rompenubes es un claro continuador de esta historia, no solamente por incluir entre su formación al mítico baterista de Aeroblus Rolando Castello Junior sino por ser el proyecto donde la canciones de Christian Van Lacke (Tlön, Tortuga, Comeflor) junto a la potencia rítmica de Max Alvarez (Ambassador) se convierten en oníricos viajes de rock pesado y psicodélico.
Rompenubes parece ser un neologismo que remite al rock pesado de los setentas donde por momentos se inventaba palabras para nombrar eso nuevo que se hacíay no tenía nombre ¿Qué quiere decir para ustedes?
VL: Es una idea bien particular. El nombre remite a un aparato que inventó el psicoanalista austriaco Wilhem Reich. Se usa para limpiar los cielos, desactiva los programas de los aerosoles químicos y ayuda a recuperar la fuerza vital en todos aquellos puntos negros donde exista una concentración de energía en decadencia, entre otras cosas ligadas al medioambiente. Además podría decirte que la elección del nombre tiene que ver con una cuestión fonética y por lo tanto también hay algo de lo que decís. En este caso el nombre compuesto nos gustó porque creo que esta música está para atravesar las nubes y seguir subiendo.
RCJ: Me gusta esto que describió Christian y su ayuda a recuperar la fuerza vital. Quizás esta sea la gran intención de nosotros con esta música, regenerar a la gente y a nosotros mismos.
La idea power trío parece ser una tradición bien potente en el rock argentino y latinoamericano ¿Qué tiene de interesante o de mágico para ustedes?
RCJ: La formación de power trio es algo que me acompaña en mi historia musical, aunque en algún momento tuve tríos que sumaron algún cantante. Con los tríos suele pasar algo particular que acá también sucede. En las grabaciones, que en este caso quedaron geniales, se suele sumar más de una guitarra que tal vez resulta difícil reproducir en vivo. Me pregunto si invitaremos algún guitarrista para acercarnos al sonido del disco, pero creo que eso lo iremos viendo con el correr de los ensayos y shows
M: Es la escuela de los maestros, quienes nos enseñaron a tocar rock en nuestro idioma. Es nuestra jerga, lo veo como una eterna postal de un momento, una ideología y hasta una forma de vida.
VL: Para mí el rock pesado siempre es mejor en trio, me gusta escucharlo y tocarlo así, donde suceden esos espacios que generan densidad y poder. Eso es lo que busco
En los últimos años hubo una relectura de varios músicos locales y de público respecto al rock argentino y sudamericano de los setentas ¿Por qué les parece que surge justo ahora?
M: Es como todo ciclo: cada cierto tiempo se repite y eso no quiere decir necesariamente que sea una moda. Sé que muchos de los más jóvenes entramos al universo del rock pesado clásico por medio de discos de nuestros padres, abuelos tíos, además de tener una adolescencia curiosa con las facilidades de plataformas de descarga. Eso nos hizo tener la posibilidad de escuchar clásicos “gratuitamente” y con variedad infinita. Creo que a mi particularmente me ayudó a encontrar muchos artistas que me influyeron terriblemente y no me parece casual que eso artistas editaron esos discos mayoritariamente dentro de las décadas de los sesenta y los setentas. Supongo que eso les sucede y les ha sucedido a muchos.
RCJ: En mi caso con Aeroblus por ejemplo, jamás imaginé la transcendencia que esta banda cobraría a partir del 2000 con los músicos jóvenes en Argentina y mucho menos en Brasil. Hubo y hay una generación que ama esta música. No tengo dudas de que esto se debe a la honestidad y fuerza con que se hizo aquella música.
¿Qué les parece que aporta cada uno al sonido de la banda? Me gustaría que Christian hable de Rolando, Rolando de Max y Max de Christian.
VL: De Rolando te digo lo mismo que decía antes de conocerlo. Simple me parece el mejor batero de rock pesado sudamericano de la historia.
M: Christian fue el gestor de la idea. Si bien el sonido de la banda es un punto que en el que convergen en nuestro caso tres vectores distintos, Christian aportó la idea de riffs melodías e ideas corales en casi todos los temas. La idea de ir a grabar a Submarino amarillo (Ndr. El estudio donde se grabó el disco) y que nos opere Felipe Fernández Moreira también fue idea suya al igual que la idea de covocar a Rolando e invitar a Kubero Diaz a tocar el resonador en el tema “Sol”.
RCJ: Max ha sido una feliz sorpresa en mi vida, puedo decir con seguridad, aunque tengamos poco tiempo de convivir que es un amigo querido, algo que para mí no es poca cosa. A esto le sumo que es un excelente músico y compañero de laburo.
Ustedes pertenecen a distintas generaciones pero sin en embargo son capaces de generar este proyecto en común ¿Qué cosas tienen en común más allá de lo musical y que cosas tienen en común desde lo musical?
VL: Nos gustan las mismas cosas y no solo a lo que a rock pesado se refiere, también cosas de jazz, Bossa, Tango, música en general. En ese punto nos movemos en la misma sintonía.
RCJ: Como muy bien decís esto es un proyecto y lo musical viene por el lado de que a nosotros nos gusta la música que cada uno hace o ha hecho en sus respectivas historias. En lo personal nos respetamos y admiramos como músicos y finalmente que ¡a todos nos gusta un buen asado! (risas)
M: Así es, somos tres generaciones distintas. Cada una con sus vivencias e infancia diferentes e incluso Rolando es de otro país. Sin embargo hay valores que son universales atemporales y de la calidad humana que se ve reflejada en los encuentros. Personalmente destaco el aprendizaje de ver una filosofía y un estilo de vida reflejada en el paso del tiempo. Eso es invalorable.
Ohmon y Resumiendo los cortes que eligieron para presentar el disco, tienen en común las referencias al rock pesado setentoso mezclada con cierta locura psicodélica ¿Cómo definirían estas canciones? ¿Cómo fueron encontrando el estilo que les permitiera estar juntos?
VL: “Ohmom” es una suite y “Resumiendo” un rocanrol. Son parte de un estilo de canción que ya vengo desarrollando desde bandas anteriores Tlön, Tortuga, Comeflor pero que acá, con Max y Rolando las hemos llevado a un toque propio. Ese aporte creo que las hace únicas.
RCJ: Hay algo que vale la pena contar. Aunque Christian ya tenía esta idea de sonido, banda y los temas juntos como banda, fueron solamente dos días de ensayo y dos de grabación lo cual es muy poco tiempo para dar forma a un estilo y sonido. Es muy distinto escuchar una maqueta de una canción que tocarla con banda, aún más con temas tan elaborados como los de Christian. Si a eso le sumamos hay temas bastante largos que requieren un ejercicio de memoria, el desafío aumenta pero si uno realmente le pone ganas y “feeling” las cosas salen bien. Por suerte ocurrió esto.
La primera está cantada por Christian y en Resumiendo comparten voces con Max ¿Cómo fue el proceso de elegir compartir las voces? ¿Qué aporta cada uno a las canciones?
RCJ: Acá me gustaría añadir que Christian tiene un estilo muy personal de cantar, cosa rara en el rock, aún más en el rock pesado que tiene un estilo bien definido. Max tiene una onda absolutamente distinta de cantar que Christian y creo que estos dos mundos generaron un resultado muy interesante.
M: Fue idea de Christian. Al momento de cantar las partes mientras realizábamos en casa una zapada, fuimos cantando a dúo y nos gustó. Por eso decidimos seguir ese camino.
A medida que va pasando el disco se nota más la libertad en las canciones y un clima de zapada ¿Qué tan importante es para ustedes sentirse libres de hacer un tipo de música no atada a un estilo?
VL: La improvisación te permite estar en un eterno estado creativo. Me gusta dejar partes al azar que tengan que ver con la inspiración del momento, con la química grupal que se forma en ese instante. Tiene que ver con la adrenalina, ya que nunca una canción con partes de libertad total va a ser tocada de la misma manera. Entonces el recurso de dejar partes a su suerte nos permite eso. No es algo nuevo, viene de la escuela de jazz, que el rock tomo para evolucionar.
M: Es que son composiciones de Christian en las que Castello y yo intervenimos. Como dijeron anteriormente solo tuvimos dos ensayos y dos días consecutivos, por lo que todo fue grabado básicamente zapado. Un poco esto tiene que ver con lo que pensamos, los tres coincidimos en que la música no debe tener ningún tipo de atadura. Debe ser libre y uno no tan egoísta como para hacer más de lo que la música dicta. Los músicos debemos ser decodificadores de eso.
En varias canciones Rolando aporta el doblebombo y muchas referencias a la tradición clásicadel rock pesado como Purple, Zeppellin o Hendrix. Teniendo en cuenta la cantidad de años que hace que viene tocando ¿Cómo fue cambiando la manera de tocar a lo largo del tiempo? ¿Qué siente que se puede encontrar de su historia musical en este disco?
RCJ: Hoy escuchando al disco, yo haría un poco más el uso de los dos bombos en algunas canciones, pero preferí simplificar la ejecución para que todo fluya. En cuanto a los cambios en mi manera de tocar con el paso del tiempo, hoy defiendo la idea de “menos es más”. Como hay momentos en que tengo mucho laburo a nivel grabaciones y recitales con cosas muy distintas se vuelve complicado hacer un trabajo minucioso de ejecución. Por eso, tuve que empezar a pensar de esa manera. Además me pasa que vivo en Brasilia y tengo la mayoría de mis proyectos en San Pablo o en Buenos Aires. Eso hace que uno tenga que tocar un poco menos para poder realizar mejor la misión.
Si tuvieran que definir a Rompenubes en dos palabras ¿Qué dirían?
M: Rock sideral
VL: Rompe nubes
RCJ: Difícil, dos palabras es muy poco, yo diría una agradable oportunidad y una excelente experiencia musical y humana.